Después de 30 años en el sector privado, Nacho decidió opositar para poder conciliar su vida laboral y personal. Asegura que tener como preparadora a una “perfecta directora de orquesta” le ayudó a conseguir su plaza en el Cuerpo de Gestión de la Administración Civil del Estado.
MARTA GÓMEZ PEÑARRUBIA
Nacho puso desde el principio su vida personal como prioridad. Eligió opositar después de 30 años en la empresa privada porque necesitaba un cambio radical que le permitiera una mejor conciliación y ahora aconseja a otros opositores “separar los momentos de estudio de los momentos de vida en común” para garantizar que todo funcione.
En su caso ha sido así. Acaba de aprobar la oposición al Cuerpo de Gestión de la Administración Civil del Estado (CGACE) y muestra la satisfacción y la templanza de quien sabe cómo trazar su propio rumbo.
También a la hora de elegir academia tuvo claro que sus circunstancias personales debían estar por delante de cualquier metodología de estudio. Apostó por SKR por la garantía de que así sería durante todo el proceso.
Y por su buena experiencia, parece que no falló en la elección. Destaca el papel de su preparadora a la que define como una perfecta “directora de orquesta” que les ha orientado a él y a sus compañeros de una manera muy eficaz, marcando los ritmos adecuados en cada momento para conseguir la plaza.