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«Durante la oposición es importante tener los oídos muy abiertos, humildad y disposición a aprender»

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En solo cinco meses el nombre de Patricia Monfort ha aparecido dos veces en el BOE. Tuvo el valor y la fuerza para compaginar la preparación al Cuerpo Superior de Administradores Civiles del Estado (CSACE) y al de Gestión de la Administración Civil del Estado (CGACE). El primero era su objetivo a alcanzar y el segundo, el plan B. Aunque el tiempo le demostró que no necesitaba este salvavidas para ella el proceso de combinar el estudio de ambos programas ha sido muy enriquecedor.

MARTA GÓMEZ PEÑARRUBIA

La primera vez que la entrevistamos, en este encuentro virtual de marzo de 2020, acababa de conseguir su plaza en el CGACE y tenía pendientes dos exámenes para el CSACE. Finalmente logró su meta en julio, lo que la obligó a dejar su puesto en la Dirección General del Plan y del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia para empezar el curso selectivo de su nuevo cuerpo en el INAP. «No podía haber tenido mejor primer destino, me ha permitido integrarme en un ritmo de trabajo muy intenso del que he absorbido mucho aprendizaje. Me quedo con la suerte de haber conocido a un equipo de grandes profesionales con plena dedicación y pasión por el servicio público, así como con la transversalidad del trabajo», nos cuenta.

«Mi motivación principal siempre ha sido la vocación de servicio público, quería ser útil para el interés general»

Ha tardado casi cuatro años en llegar hasta aquí y aunque escuchándola hablar da la sensación de que ha sido un camino fácil, nunca lo es. Cuando le preguntamos por los suspensos los presenta como «parte del proceso de formación, madurez y equilibrio». Lo dice así de claro y sin perder esa sonrisa perpetua que seguramente tenga mucho que ver en su colección de éxitos. Los altibajos nunca la han empujado a plantearse seriamente tirar la toalla, pero admite que ha tenido «temporadas más angustiosas en las que buscaba alternativas, de ahí que empezara a opositar a CGACE».

Lo más duro de todo el proceso para ella ha sido la incertidumbre y la dependencia económica, sacrificar tiempo con la familia y amigos «cada tarde y festivo que tenía que estudiar». Dedicar un mínimo de ocho horas a preparar la oposición la ha obligado a posponer decisiones vitales, pero un rotundo y convencido «¡Sí!» es lo único que sale de su boca cuando loe preguntamos si ha merecido la pena.

«Todavía queda algo de estrés postraumático», reconoce entre risas al recordar los momentos difíciles. Como la mayoría de los opositores, su principal apoyo lo halló en su entorno más cercano: «Me daba oxígeno pasar tiempo en la naturaleza con mi novio, amigas o familia». Ellos le daban la fuerza para perseguir su sueño y lo que la animaba a seguir adelante eran «las ganas de trabajar como Administradora Civil del Estado y la confianza en que con paciencia, constancia y dedicación se consigue».

«Me obligaba a caminar cada día un ratito o intentaba desconectar en el rato de la comida y cena viendo programas o series de humor»

Su motivación principal siempre ha sido la vocación de servicio público, quería «ser útil para el interés general». La versatilidad, transversalidad y multidisciplinariedad del CSACE son las razones por las que eligió la oposición por la que apostar, «también por sus funciones gerenciales que creo ofrecen margen para influir en la toma de decisiones».

En el camino no solo la han acompañado sus allegados, esos que te aman y apoyan de forma incondicional, sino también sus compañeros, porque «nadie te entiende mejor que otro opositor», y el equipo de preparadores con el ha establecido vínculos más allá de lo académico en estos cuatro años. Para Patricia «los consejos de cada preparador han dejado huella, es importante tener los oídos muy abiertos, humildad y disposición a aprender», asegura. Le preguntamos por el más valioso de ellos, el que se grabó como un mantra, y no lo duda: «Demuéstrale al tribunal tus ganas y pasión por la profesión, fórmate para que el tribunal diga: “quiero trabajar contigo, la Administración necesita gente como tú”».

En cuanto al método, lo explicaba Kike Cortés, director de SKR, en esta carta hace solo unos días: cada opositor debe encontrar sus rutinas y seguirlas de acuerdo a una planificación asumible y ambiciosa a partes iguales. Como buena discípula, a Patricia le resultaba fundamental la rutina en el estudio diario para mantener la concentración y las semanas previas a los exámenes procuraba cuidar las horas de sueño y la alimentación, «también me obligaba a caminar cada día un ratito, momento que aprovechaba para hablar por teléfono con mi novio o con mi tía, o intentaba desconectar en el rato de la comida y cena viendo programas o series de humor», nos cuenta. Su última adicción televisiva: The Office.

«Enriqueceos y disfrutad del camino, buscad la oportunidad para reforzar la madurez y el equilibrio»

El descanso también es primordial para asimilar conocimientos de la manera más efectiva posible, por eso el día de antes del examen «intentaba dejar de estudiar a determinada hora y me echaba a caminar y caminar por zonas verdes escuchando música». Patricia reconoce tener muchas supersticiones y manías para estas horas previas a las pruebas, por ejemplo, varias canciones de referencia que necesitaba escuchar sí o sí. Aunque lo peor, explica, «era hasta soñar con los exámenes… Confieso que a veces sigo teniendo pesadillas».

Patricia Monfort está deseando crecer profesionalmente dentro de la Administración, pero su humildad y su prudencia le aconsejan no tener prisa, todo ha de madurar a su ritmo y de cada sitio que pise quiere empaparse a conciencia, paso a paso, sin aires de grandeza. ¿Dónde se ve en cinco años? «Aprendiendo del entorno», responde con sosiego. ¿Cuál sería su destino ideal? «Uno con un gran equipo del que aprender, con un superior apasionado por el servicio público, que reconozca y defienda el trabajo de su equipo. A partir de ahí me gustaría conocer diferentes materias, desde servicios comunes a política sectorial, pasando por la intensidad de los gabinetes».

Antes de despedirnos, le pedimos que mande un mensaje para otros opositores: «Enriqueceos y disfrutad del camino, buscad la oportunidad para reforzar la madurez y el equilibrio. Tened humildad y disposición para aprender constantemente. ¡Mucho ánimo! Acaba llegado la fecha en la que leeréis que sois miembros del cuerpo para el que os preparáis».

 

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Marta Gómez Peñarrubia es periodista y responsable de comunicación de SKR Preparadores. Le interesan más las dudas que las certezas. Tuiterías@marta_gomz

 

 

 

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