Logo - Producto

10 razones para empezar HOY a opositar al Cuerpo de Gestión del Estado

Comparte este post

Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp

Contenidos

Cuando uno se plantea opositar es frecuente que le asalten de inmediato los ‘peros’: “Pero es muy difícil”, “pero a mi edad y con mis circunstancias», “pero si nunca he estudiado derecho”. Pero, pero, pero. ¿Y si nos centramos en los ‘síes’?

JOSÉ MARÍA CASADO FRAILE

Es lógico sentir vértigo y pereza. Porque opositar supone sin duda un reto. Pero aquí llega Papá Noel con buenas noticias: estamos en el mejor momento para opositar que ha habido en décadas y las razones para apostar por ello superan con creces a aquellas para no hacerlo. Aquí van diez de ellas:

1. La regularidad en las convocatorias: de esta oposición SÍ puedes fiarte

Al contrario de lo que ocurre con otras muchas oposiciones, el Cuerpo de Gestión de la Administración Civil del Estado (CGACE) es como un tren súper fiable que pasa todos los años. Sin barbechos inesperados, sin requiebros por la espalda. Y eso permite a uno saber dónde se mete y qué esperar de ello, lo que es vital a efectos de tener un horizonte temporal claro al que aferrarse, tanto psicológicamente (visualizar la línea de llegada es vital en toda carrera de fondo), como logística y económicamente (pues gran parte de quienes opositan lo hacen tirando de ahorros, del paro o en contextos de esfuerzo personal o económico considerables). Es decir: que tu cita aquí no será a ciegas.

2. La duración media hasta que se aprueba la oposición: es MUY asequible

Si uno analiza la media de tiempo dedicado por quienes aprobaron esta oposición, se sorprenderá para bien: dos intentos o, lo que es lo mismo, unos dos años es lo que suele llevar aprobarla. Lo que constituye una inversión de tiempo más que razonable. Pues, si uno piensa por ejemplo en lo que lleva sacarse un buen máster, verá que en ese caso invertirá al menos un año, si no más incluso. Sólo que en este caso no vuelves a la jungla del sector privado, sino que te solucionas para siempre tu futuro laboral. El premio Gordo. Nada menos. 

Incluso hay quien se consigue sacarla a la primera, cosa que en otras oposiciones de esta categoría sería ciencia ficción. No es lo que estadísticamente predomina, pero existe un número nada residual de gente que lo consigue. Bien es cierto que aquí influye la suerte, las circunstancias personales, lo eficiente que sea uno o el tiempo del que uno disponga hasta que llegue el examen.

3. El tiempo extra hasta el siguiente proceso selectivo

En este último sentido también estamos de suerte este próximo proceso: porque hasta mayo/junio del 2023 no se prevé que sea el primer examen, lo que en circunstancias normales debiera permitir dar casi dos vueltas (de comenzar ya mismo a estudiar, claro). A lo que se suma otra beneficiosa casualidad este año: que el segundo examen por tanto caería después del verano, lo que supone un tiempito extra de regalo para apuntalar ese último ejercicio.

Pensemos que, al ser tipo test el primer examen, no es necesario ser infalible, sino asegurar un número de aciertos que, aunque no sea de manera sobrada, lo mantengan a uno en vida para poder aprovechar ese bonus time que nos regalará el cronograma del proceso 2023.

4. Esta oposición SÍ tiene bolsa de empleo y además bien cargadita

La bolsa de empleo consiste básicamente en sustituciones temporales a funcionarios que, por motivos varios, están de baja. ¿Y cómo se cubren estás sustituciones? ¡Cooorrecto, por opositores! 

Y hay otro notición en este sentido: no sólo entran quienes hayan quedado finalistas en procesos anteriores; tal es la necesidad de la Administración que, a fecha de hoy, están llamando para estas suplencias a opositores que ni siquiera han llegado a aprobar el primer examen. Así que efectivamente la bolsa de empleo está MUY activa. 

Y esto es un puntazo por varios motivos:

  • porque alivia radicalmente la presión y estrés añadido de quien oposite pelado de dinero; 
  • porque resulta tremendamente pedagógico para un opositor, pues ejercita en la praxis precisamente las materias que tiene que aprenderse para el examen;
  • y porque visualizar el premio que a uno le espera resulta un súper turbo para el opositor por el estímulo que representa.

5. El temario coincide mucho con el de otras oposiciones: ¡llévese tres por uno!

Una cuestión muy importante a valorar cuando uno decide a qué opositar es lo versátil o reutilizable que sea el temario que uno se va a empollar. Igual que en el mundo de la Bolsa, donde la primera regla es diversificar las inversiones. Y aquí la oposición a CGACE es imbatible. ¿Por qué? Porque el temario coincide en gran medida con el de muchas otras oposiciones análogas o equivalentes a ella, ya sea su equivalente en las Comunidades Autónomas, en Ayuntamientos de cierta envergadura o en oposiciones de la propia AGE pero de rango inferior o superior. Así que, al hilo del esfuerzo que uno hace para opositar a ésta, a su vez está avanzando camino en esas otras. Lo que permite poner los huevos en varias cestas sin que eso suponga una total duplicación de esfuerzos.

6. Es perfectamente posible sacarla aun con trabajo y/o cargas familiares

Al contrario de lo que ocurre en otras oposiciones, como pueden ser las del Grupo A1, donde el perfil predominante es claramente el del recién licenciado que oposita con todas las comodidades y a tiempo completo, en el caso de la oposición a CGACE el perfil es de gente con circunstancias complicadas: con hijos, trabajo en paralelo o con el pack completo. Y lo interesante es que es un hecho constatado que se puede sacar esta oposición aun en esas circunstancias. Vamos, que no serás el primer pionero en el Salvaje Oeste si decides lanzarte por esta senda.

Ahora bien, hay que ser conscientes del esfuerzo extra que esto supone y de lo eficiente que uno tiene que ser en ese caso. También del papel especialmente importante que es estar bien asesorado, monitorizado y dirigido por una buena academia. Porque cuando el tiempo de dedicación escasea la optimización del tiempo es vital.

Y, en fin, es importante no frustrarse ni pretender compararse con quienes vayan más ligeros de equipaje. Y tener la confianza de que se puede, y creérselo. E ir a comerse el mundo.

7. Es viable aunque uno no haya estudiado jamás Derecho

Hay quien no ha tocado el Derecho en su vida ni con un puntero láser amarrado a una pértiga. Y, oh, notición: no-im-por-ta.

¿Por qué no importa? Por una parte, porque el Derecho no es la NASA. Tiene sus cositas, pero uno acaba cogiéndoles el truco. Y, por otra parte, porque la inmersión en la materia es tan intensiva que uno acaba haciendo el pino-puente con doble tirabuzón. 

Y no es una especulación: la mitad de los opositores a Gestión cursaron estudios totalmente ajenos a la materia: ingenieros, periodistas, economistas, publicistas, … Y una tribu de repatriados de Ibiza que dejaron de ser hippies, pero no de ser palizas…. Vamos, que el elenco de gente que ha sacado esta oposición podría salir de una canción de Sabina.

Así que nada de excusitas en este sentido tampoco.

8. El formato de examen es 100% friendly: ni exámenes orales ni idiomas

Un tipo test y un examen de preguntas cortas con caso práctico. Eso es todo. Y todo en torno a los mismos seis bloques de Derecho Público. 

Esto es importante, porque mucha gente tiene la idea de que todas las oposiciones tienen cante y eso, con razón, asusta, y la idea de que hay que saberse la norma con una literalidad casi sobrehumana. Pero en este caso no es así. Todo es más natural y orgánico. Hay que saberse muy bien la normativa, por supuesto, pero sin que todo ello recaiga exclusivamente en la memorización. Pues tiene su propia lógica y uno acaba aprendiendo a moverse también semi-intuitivamente por ella.

Ya os dejamos aquí algunos consejos de Luis Platas para enfrentar el examen tipo test, justo a las puertas de la última convocatoria celebrada, y poco después, Carlos García Monío resumía los trucos para superar el segundo examen en este otro artículo. Ambos son funcionarios del CGACE y preparadores en SKR.

9. El HISTÓRICO número de plazas ofertadas

Para entender por qué ahora es sin duda el momento para apostar por esto basta conocer un dato: alrededor del 56% del funcionariado va a jubilarse en los próximos diez años. Eso es mucha gente, y por tanto muchas plazas que cubrir.

Y lo relevante de esto es que abre una inmensa puerta que permanecerá expedita previsiblemente unos añitos. Los suficientes para que quien empiece ahora llegue a tiempo de colarse en el Olimpo.

¿Y qué implica esto en cadena? Más plazas, más opciones de que a uno le toque un primer destino acorde con sus preferencias, una promoción intracuerpo más rápida, más puestos libres y de mayor nivel donde elegir… Más y mejor de todo.

En fin, que el momento es sin duda ahora, pero hay que ensillar cuanto antes.

10. All-in-one: seguridad, conciliación y movilidad

Dos años de esfuerzo decíamos. ¿Y luego? Luego…

  • Seguridad laboral: Para siempre. No tendrás que preocuparte por el desempleo nunca más.
  • Conciliación: sea la familia, los bolos o el ajedrez tu prioridad, podrás compaginarlos con tu trabajo. Sin trampa ni cartón. Podrás modular el peso del trabajo en tu vida, según tus prioridades o el momento vital en el que te encuentres. 
  • Movilidad: tanto funcional como territorial. Porque el Cuerpo de Gestión es un cuerpo transversal, cuyo campo de acción es prácticamente cualquier Ministerio u organismo público de la AGE. Y porque no sólo está presente en Madrid Capital, sino en todo el territorio nacional. Incluso con algunos puestos en el extranjero.

Pero…

En resumidas cuentas: si uno se plantea algún ‘pero’ que sea “¿pero qué demonios hago que no me he lanzado ya?”. Y ten clara una cosa frente a la pereza y los miedos: esto es como meterse al agua fresca del mar. Uno tiene que zambullirse de golpe, porque el golpe frío dura poco y luego se está en la Gloria.

Profesional - LinkedIn
José María Casado Fraile es subdirector de SKR | Escuela de Gobierno y Transformación Pública. Licenciado en Derecho, ejerció la abogacía durante 8 años antes de dejarse seducir por el mundo de las oposiciones y la formación de los líderes del futuro.

Enlaces de interés:

Artículos relacionados:

¡Solo es un examen! Pero si te la juegas el 6 de noviembre te conviene leer estos consejos…
Las trampas (y los trucos para solventarlas) del segundo ejercicio de la oposición al Cuerpo de Gestión del Estado
El estudio meticuloso previo y su correcta gestión: la clave del éxito para tu examen de la oposición
“Hay que priorizar la salud mental en la oposición. No sirve de nada sacar una plaza si lo haces a costa de lo que tú eres”
Por qué compaginar oposiciones al Estado y a la Comunidad de Madrid

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Una mirada al mundo del sector público

Entérate de todas las novedades sobre el sector público y las oposiciones: