Los alumnos de la XIX (2023-2025) promoción del Título Universitario Promentor de la Fundación Prodis cierran su etapa universitaria en un emotivo acto junto a familiares, amigos y profesores en la Facultad de Formación de Profesorado y Educación de la Universidad Autónoma de Madrid.
Los ya graduados fueron protagonistas indiscutibles del acto desde el principio. Hicieron una entrada triunfal en el salón seguidos por una orgullosa mesa presidencial. Patricia, Pablo y Marta tuvieron el honor de hablar en nombre de sus compañeros y compañeras. En sus discursos destacaron los momentos vividos durante estos dos años universitarios y agradecieron a profesores y mediadores el trabajo realizado, así como el apoyo constante ya que su dedicación “ha marcado la diferencia” en sus vidas.
Dos alumnas en prácticas, Sofía y Paula, tomaron la palabra para agradecer a los profesores la forma de enseñar desde el cariño y la responsabilidad y destacaron que todos los docentes eran “un ejemplo de cómo formar desde el respeto”. Además, aseguraron que se llevan “una mochila llena de bonitos recuerdos, aprendizajes y sonrisas” gracias a todos los que han formado parte de esta experiencia. Y, por último, agradecieron a todos los alumnos que se graduaban por acogerlos con cariño desde el primer día y por enseñarles que “no hay barreras cuando hay apoyo, cariño y confianza”.
“Conoced vuestras limitaciones y poned en juego todas vuestras capacidades”
Durante su intervención, Lola Izuzquiza, directora del Programa Promentor, resaltó el “espíritu de lucha y superación” que han mostrado en estos dos años. “Sensibilidad, pasión, responsabilidad, empatía” son algunos de los valores y características que destacó de los jóvenes que se graduaron. Gabriel Castañón, vicepresidente de la Fundación Prodis, animó a todos los presentes a “replicar los valores que tienen los alumnos de Promentor en nuestras vidas” y destacó el compromiso de las empresas colaboradoras con el programa.
Por su parte, Jesús Manso, Decano de la Facultad, aprovechó para agradecer a Prodis “el apostar por la Universidad Pública, por creer que todas las personas tienen derecho a una educación de calidad”. A continuación, se dirigió a los alumnos para recordarles que brillan porque son brillantes y que “los éxitos nunca son del todo individuales, agradeced siempre y mirad a quien han estado a vuestro lado”. Además, les dio un último consejo “conoced vuestras limitaciones y poned en juego todas vuestras capacidades”.
“Un ejemplo de cómo formar desde el respeto”
Antes de imaprtir su Lección Magistral, Kike Cortés, Director de la Escuela de Gobierno y Transformación Pública SKR, agradeció a Prodis la oportunidad de formar parte de un proyecto tan estimulante y enriquecedor. Cortés, destacó el valor de las empresas como “componente vital y activo de nuestra sociedad”, felicitó a las familias por el apoyo incondicional, por el esfuerzo y por los excelentes resultados.
Más allá de lo institucional, el director de SKR dedicó unas líneas a todos y cada uno de los alumnos, subrayando lo que había aprendido de ellos apoyándolos en sus Trabajos de Fin de Título. Aseguró con satisfacción que en realidad “la lección magistral la había recibido él”. Para finalizar su intervención, recordó las tres cés; “Creer en vosotros mismos; Crear sin miedo y Crecer con propósito”. Por último, insistió en que la magia está en ellos y que son un regalo maravilloso.
“No es un final, sino una nueva etapa que comienza hacia el mundo laboral”
Tras las intervenciones, se procedió a la imposición de becas y entrega de diplomas por parte de la mesa presidencial. Además, se realizó el paso de testigo de los alumnos egresados a los alumnos de primero y posteriormente se proyectó un montaje audiovisual con los mejores momentos vividos durante estos dos años.
Para cerrar el acto, Marta Morgade Salgado, Vicerrectora de Compromiso Social y Sostenibilidad de la UAM, destacó la “lección de vida y de superación” del trabajo de los alumnos, así como la “adaptación con una flexibilidad asombrosa” a los profesores y al entorno universitario. Aseguró que los profesores eran “el corazón del programa” y que eran el motor que les había traído hasta aquí. A los alumnos, les recordó que eso no era un final, sino una nueva etapa que comienza hacia el mundo laboral y que no se les olvidara “creer en ellos”.
